Qué es el Burnout y por qué debes prestarle atención
Qué es el síndrome de Burnout y cómo identificarlo
Sobre todo porque conseguir un tratamiento a tiempo podría hacer que tomes medidas al respecto.
Dentro de las consecuencias que puedes tener, está la de perder tu patrimonio, afectar tus relaciones interpersonales, incluso tener repercusiones de salud graves más adelante.
Así que acá tienes 10 síntomas que podrían estarte alertando sobre un posible Burnout.
1. Agotamiento físico
Por lo general, el Burnout empieza a manifestarse a través de un agotamiento físico extremo, que no te permite funcionar de manera normal.
Casi como si hubieras estado en movimiento constante, y no pudieras recuperarte de ninguna manera, sientes cansancio todo el día y no hay descanso que sirva para contrarrestarlo.
Esto afecta el rendimiento en el trabajo y podría hacer que no te sientas capaz de realizar hasta las más pequeñas actividades diarias.
2. Pérdida de energía
Es inevitable perder energía si estás experimentando un agotamiento constante, pues no tienes posibilidad de recuperarte para empezar de nuevo más fresco al día siguiente.
El cansancio puede consumir tu energía y esto empieza desde el manejo de tu mente hasta lo que pasa con tu cuerpo.
Sin energía, difícilmente podrás cumplir con tus metas profesionales, no podrás estar atento en las reuniones importantes, ni tendrás capacidad para resolver los problemas que se te puedan presentar.
3. Estrés crónico
Es muy común que haya períodos de tiempo en los que el estrés en el trabajo se hace más evidente, posiblemente porque haya entregas complejas, o retos profesionales que requieren toda tu energía.
Sin embargo, sentir estrés constante, acumulado y persistente, hace que se convierta en un estado crónico muy difícil de controlar.
Esto puede generarte desmotivación en tu trabajo y en consecuencia, el riesgo de perder tu posición laboral.
4. Malos hábitos de sueño
Podría pensarse que tener agotamiento físico hará que tengas sueño constantemente, y posiblemente sea así, pero también puede generarte un desbalance.
Al estar agotado durante el día, buscarás momentos para dormir cuando no es lo indicado, y en la noche tu mente estará dando vueltas sin dejarte descansar.
Se ha comprobado científicamente que dormir poco puede resultar en problemas serios de salud, pues es en la noche cuando las células se regeneran y tu cuerpo sana lo que en el día pudo estar afectado.
5. Problemas de salud recurrentes
Si has notado que estás constantemente sintiéndote enfermo, y no hay explicación lógica para una seguidilla de problemas, entonces podrías estar experimentando síntomas del Burnout.
Es muy frustrante enfermarse todo el tiempo, casi se siente como si estuvieras estancado sin poder avanzar y eso suma al estrés por no poder estar haciendo una vida normal.
Por supuesto, hay que ser amables con nosotros mismos, entender que los procesos naturales responden a lo que el cuerpo y la mente te piden.
Lo importante es que estés muy atento para que esto no desencadene consecuencias peores en tu rutina diaria afectando tus metas y objetivos.
6. Dolores de cabeza permanentes
Tener dolor de cabeza de forma frecuente puede considerarse normal, pues es una respuesta natural del cuerpo a muchos factores; incluso detalles pequeños como el ruido, que están por fuera de nuestro control.
Sin embargo, si empiezas a sentirlo permanentemente sin que haya una razón evidente, entonces debes prestar atención pues puede ser un síntoma del Burnout.
Esto con toda seguridad podría afectar tu disposición para realizar tus tareas diarias, hasta las más rutinarias como manejar, caminar de un lugar a otro, tener una conversación con alguien.
Además, los dolores de cabeza vienen acompañados de otros síntomas que podrían empeorarlo todo, causando que baje tu productividad en el trabajo.
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7. Depresión
La depresión si bien ha existido hace muchísimo tiempo, es una condición psicológica que viene afectando a gran parte de la población mundial actualmente.
Esto no es algo que le suceda a unas cuantas personas, cada vez es más recurrente y preocupante. De hecho, se ha vuelto muy común escuchar a personas decir que están tomando medicación para la depresión.
Si bien esta condición debe ser tratada con responsabilidad y seriedad, sería positivo identificar los factores que la desatan.
De esta forma podría llevarse un estilo de vida mucho más sano y en consecuencia una calidad de vida mucho más alta.
8. Ansiedad
Al igual que la depresión, la ansiedad viene de la mano del Burnout, debido a que el estrés puede hacer que nuestra mente trabaje sin parar y nos genere esta sensación de preocupación, de miedo y de incertidumbre.
La ansiedad puede inhabilitar a las personas a trabajar o hacer sus vidas con total normalidad, especialmente si no es tratada a tiempo.
Sin duda, puede llevarte a tomar malas decisiones financieras o personales, haciendo que tu vida pierda sentido si no estás acompañado por un profesional que pueda guiarte con el mejor tratamiento.
9. Bajas defensas
Piénsalo así: Si tu mente y tu cuerpo están actuando en contra de tu salud, ¿cómo podrá tu sistema defenderse para que pueda funcionar correctamente?
Es casi imposible estar sano si no tienes en equilibrio todo tu organismo, desde lo físico hasta lo espiritual.
Cuando tus defensas bajan, es más factible que te enfermes constantemente; desde un resfrío, hasta problemas digestivos, nerviosos, entre muchos otros.
Trata de identificar si este es tu caso o el de alguien que conozcas, cuestiona el resto del contexto y define si podría estar siendo consecuencia del síndrome de Burnout.
10. Irritabilidad
Si tu mente y tu cuerpo no están funcionando correctamente, es absolutamente natural que empieces a sentirte irritable porque, para empezar, no estás pudiendo resolver tu situación mientras te exigen que resuelvas otra cantidad de detalles, bien sea en el trabajo o en tu vida personal.
Empiezas a discutir o enojarte con facilidad, poniendo en riesgo tu trabajo y tus relaciones. No tienes tanta paciencia, y sientes que no hay muchos motivos para sentirte feliz.
Nadie quisiera estar irritable todo el tiempo, menos cuando hay tantas cosas increíbles por las cuales estar agradecido y disfrutando de la vida.
¿Cómo prevenir el síndrome del Burnout y cuidar tu salud mental?
Para empezar, es importante que tengas en consideración, que tratar un síndrome de Burnout con éxito puede tardar varios meses.
Incluso, si no se hace un seguimiento riguroso del tratamiento al que se deba someter, podría volver en un futuro.
Lo más importante es empezar por ser concientes de lo que está sucediendo, y decidir buscar una solución. Es una elección propia el querer mejorar o seguir estancado hasta sufrir consecuencias desastrosas.
Lo ideal sería trabajar en la prevención, de esta manera no se llegaría a estados tan críticos como los que te contamos en el listado anterior.
Existen dinámicas como la meditación, la alimentación saludable, el mindfulness, que serán grandes herramientas hacia una recuperación sostenible en el tiempo.
Si la situación ha avanzado, entonces es importante visitar a tu médico de cabecera o a un psicólogo para que hagan un diagnóstico responsable y certero.
Seguramente, dependiendo de tu contexto y tus circunstancias, el tratamiento podrá variar, pero empezaría por disminuir o evitar por un período de tiempo, los espacios donde esta sensación aumenta, lo más común es tomarse una licencia laboral.
Más allá de tomarse un descanso de las responsabilidades laborales y algunas personales, es fundamental que la persona que lo sufre ponga todo de su parte para adoptar hábitos saludables.
¿Conoces a alguien que sufre de Burnout?
Finalmente, con esta valiosa información, tienes la capacidad de tomar el primer paso hacia la identificación del problema.
No permitas que un síndrome como el Burnout haga que pongas en riesgo tu dinero, tus finanzas, tu trabajo o tus relaciones más preciadas.
Esto puede sucederle a cualquiera, así que la empatía será la mejor manera de afrontarlo.
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