Desde sus humildes comienzos en Seattle hasta convertirse en una de las marcas más reconocidas a nivel mundial, la historia de Starbucks es una fuente de inspiración para emprendedores que buscan abrirse camino en el mundo de los negocios.
Fundada en 1971 por tres socios apasionados por el café, Starbucks ha demostrado cómo una visión compartida, un enfoque innovador y una estrategia de negocio sólida pueden transformar un pequeño negocio local en una potencia mundial.
La historia de Starbucks es el ejemplo perfecto de cómo una marca puede conectarse con sus clientes y cultivar una lealtad duradera, al mismo tiempo que se adapta a las cambiantes demandas del mercado y a los desafíos competitivos.
Los primeros años marcaron la historia de Starbucks
En 1971, Jerry Baldwin, Gordon Bowker y Zev Siegl fundaron Starbucks y abrieron su primera tienda cerca del histórico Pike Place Market en Seattle.
Los tres fundadores de Starbucks compartían una pasión por el café y el té, y habían adquirido experiencia en el mundo académico.
Invirtieron y pidieron prestado algo de dinero para abrir la primera tienda en Seattle, que llamaron «Starbucks» en honor al primer oficial, Starbuck, en la novela clásica de Herman Melville, Moby Dick.
La fuente de inspiración para los primeros años de Starbucks
Alfred Peet, un emprendedor especializado en tostar café, resultó ser una gran fuente de inspiración para los creadores de Starbucks.
Peet importaba fino café arábica a los Estados Unidos desde la década de 1950 y abrió una pequeña tienda, Peet's Coffee and Tea, en Berkeley, California, en 1966.
Este se especializó en importar cafés y tés de primer nivel, lo que inspiró a los fundadores de Starbucks a basar su modelo comercial en la venta de granos de café y equipos de alta calidad.
Incluso, el empresario se convirtió en el proveedor inicial de granos de café verde para Starbucks, y los socios compraron una tostadora usada de Holanda para experimentar con las técnicas de tostado de Peet y crear sus propias mezclas y sabores.
En los primeros años de la década de 1980, Starbucks ya había inaugurado cuatro establecimientos en Seattle que se diferenciaban de la competencia gracias a la alta calidad de sus cafés recién tostados.
No obstante, ese mismo año Siegl optó por perseguir otros intereses y abandonó a los dos socios restantes, por lo cual Baldwin asumió el cargo de presidente de la empresa.
La era de Howard Schultz como director de marketing en la historia de Starbucks
En 1981, Howard Schultz, un vendedor de Hammarplast (una empresa sueca que fabricaba equipos de cocina y artículos para el hogar) aparece en la historia de Starbucks. Este le vendía cafeteras de goteo, y notaba lo grandes que eran los pedidos de la empresa, lo que lo llevó a visitarla.
Schultz quedó tan impresionado que decidió seguir una carrera profesional en Starbucks y fue contratado como director de marketing en 1982.
Al principio, los clientes primerizos se sentían incómodos en las tiendas debido a su falta de conocimiento sobre los cafés finos por parte del nuevo director de Marketing.
Por lo que trabajó con los empleados de la tienda en el desarrollo de habilidades de venta amigables con el cliente. Y produjo folletos que facilitaron que los clientes conocieran los productos de Starbucks.
Las ideas de Schultz para hacer más grande la historia de Starbucks
La mayor idea de Schultz para el futuro de Starbucks se produjo durante la primavera de 1983, cuando su empresa lo envió a Milán para asistir a una feria internacional de artículos para el hogar.
Mientras estuvo en Italia, quedó impresionado con los cafés del país, y el negocio rentable que estos implicaban. Incluso, descubrió que sólo Milán contaba con más de 1.500 cafeterías.
Schultz se inspiró y pensó en hacer algo similar en Starbucks, imaginando convertir una pequeña operación regional en una cadena nacional de cafeterías a través de una rápida expansión de tiendas.
No obstante, Baldwin y Bowker no se mostraron entusiasmados con la propuesta de Schultz, puesto que no deseaban que Starbucks se alejara demasiado de su modelo de negocio convencional.
Shultz compra Starbucks a través de inversores
Viendo que no sería capaz de persuadir a Baldwin y Bowker para que aceptaran la idea del café, Schultz dejó Starbucks en 1985 y emprendió su propio negocio de café, llamada “Il Giornale”, que fue un éxito inmediato y se expandió rápidamente a varias ciudades.
No obstante, en marzo de 1987, Baldwin y Bowker tomaron la decisión de vender Starbucks, lo que impulsó a Schultz a utilizar Il Giornale para adquirir la compañía, contando con el apoyo de los inversores.
Schultz unificó todas sus operaciones bajo la marca Starbucks y apostó por el modelo de cafetería como motor del negocio, incluyendo la venta de granos, maquinarias y otros artículos en las tiendas de Starbucks.
El ascenso meteórico de Starbucks
Bajo la tutela de Schultz, en tan solo cuatro años la franquicia de cafeterías en Estados Unidos experimentó un crecimiento impresionante, pasando de tener menos de 20 tiendas a contar con más de 100.
De esta manera, Starbucks inició un vertiginoso proceso de expansión que se mantuvo constante tras la salida a bolsa de la compañía en 1992.
En 1996, la empresa comenzó a abrir establecimientos fuera de América del Norte y, en poco tiempo, Starbucks se consolidó como la cadena de cafeterías más grande del mundo.
A finales de esa década, la compañía ya contaba con alrededor de 2.500 tiendas distribuidas en una docena de países.
Para 2007, la cadena contaba con más de 15.000 ubicaciones en todo el mundo. Sin embargo, estaban pasando por una crisis económica, por lo cual se hizo necesario que, en enero de 2008, Schultz regresara como director ejecutivo.
Lecciones de la historia de Starbucks para emprendedores
Uno de los aspectos más destacados en la historia de Starbucks es su enfoque en la calidad del café y la experiencia del cliente.
Desde sus primeros días como una única tienda en el mercado de Pike Place, Starbucks ha mantenido un compromiso inquebrantable con la calidad de sus productos y la satisfacción del cliente.
A medida que Starbucks fue creciendo, la compañía continuó innovando en la forma en que servía y vendía café; introduciendo nuevas bebidas y opciones personalizadas para satisfacer las preferencias individuales de sus clientes.
El éxito de Starbucks no sólo se basa en la calidad de su café y su ambiente, sino también en su capacidad para expandirse de manera agresiva y adaptarse a los cambios en el mercado.
La compañía ha sido pionera en la adopción de tecnologías como aplicaciones móviles y programas de lealtad, así como en la exploración de nuevos formatos de tiendas y mercados internacionales.
A lo largo de su historia, Starbucks ha enfrentado numerosos desafíos y obstáculos, pero ha sido capaz de superarlos y continuar creciendo.
Para los emprendedores en busca de inspiración, la historia de Starbucks ofrece valiosas lecciones sobre cómo desarrollar una marca sólida, mantener la calidad y la innovación constantes, y adaptarse a las cambiantes demandas del mercado y a la competencia.
Adquisición de panaderías, nueva marca de cafés y menús
Como primera medida, Schultz supervisó el cierre de 900 tiendas e implementó una estrategia ambiciosa para asegurar nuevas vías de crecimiento.
Estas incluyeron adquisiciones de una cadena de panaderías. Y asociaciones con los fabricantes de un sistema de elaboración de café. Así como la introducción de una marca de café instantáneo.
También supervisó los cambios en las ofertas del menú en las tiendas Starbucks; pues la marca había comenzado a vender alimentos en 2003.
Estos movimientos fueron en gran medida exitosos y, para 2012, Starbucks se había recuperado financieramente.
Debido a esta buena gestión, Schultz nuevamente renunció como director ejecutivo y fue reemplazado por Kevin Johnson en 2017.
Esto no significo la salida definitiva, pues Schultz continuó activo en la empresa y se desempeñó como presidente ejecutivo hasta 2018, cuando fue reemplazado por Myron Ullman.
En 2019, el Starbucks más grande del mundo, un Starbucks Reserve Roastery, abrió en Chicago. En 2021, Starbucks tenía presencia en docenas de países alrededor del mundo y operaba más de 32,000 tiendas.
Sostenibilidad y desarrollo comunitario en la historia de Starbucks
A lo largo de los años, Starbucks se ha comprometido a apoyar a las comunidades agrícolas con las que trabaja a través de una variedad de programas sociales.
Sus esfuerzos buscan mejorar las condiciones sociales y económicas de los agricultores de café en todo el mundo.
Desde proporcionar préstamos y pagos de ayuda a los agricultores hasta compartir prácticas agronómicas y comprar café de manera ética.
De hecho, Starbucks está trabajando activamente para abordar algunos de los desafíos más urgentes en la cadena de suministro del café.
Además de sus esfuerzos por ser sostenible en la cadena de suministro, Starbucks también ha buscado tener un impacto positivo en las comunidades en las que opera.
Por ejemplo, establecieron el programa «Starbucks Foundation» para donar dinero a organizaciones sin fines de lucro en todo el mundo.
Desde entonces, la fundación ha donado millones de dólares a organizaciones que trabajan en distintas áreas. Como la educación, la salud y la lucha contra la pobreza.
Libros recomendados
Una empresa marcada por la colaboración con los desafíos sociales
En los últimos años, la historia de Starbucks ha estado marcada por la toma de medidas específicas para abordar algunos de los desafíos sociales más apremiantes.
En 2018, después de un incidente en el que dos hombres negros fueron arrestados mientras esperaban en una tienda de Starbucks en Filadelfia, la empresa cerró temporalmente todas sus tiendas en los Estados Unidos.
El cierre lo aprovechó para capacitar a sus empleados sobre el prejuicio racial.
Durante los meses siguientes, Starbucks continuó abordando cuestiones de igualdad racial. Incluyendo la implementación de políticas para garantizar que las personas sin hogar y las personas LGBT+ sean bienvenidas en las tiendas de Starbucks.
Sin duda alguna, la historia de Starbucks es una historia de éxito empresarial.
Pero también es una historia de esfuerzos por ser socialmente responsable y tener un impacto positivo en las comunidades en las que opera.
Lo cual le genera sinergias que lo posicionan en el lugar que la cadena de cafeterías más famosa del mundo ocupa hoy día a nivel internacional.
Desde sus humildes comienzos como una pequeña tienda en Seattle hasta convertirse en la cadena de cafeterías más grande del mundo.
Starbucks ha sido pionera en la venta de café de alta calidad. Y ha llevado a cabo esfuerzos significativos para mejorar la vida de los agricultores de café y las comunidades en las que opera.
Sin embargo, como cualquier empresa grande y global, la historia de Starbucks también ha enfrentado desafíos y críticas. A día de hoy, la empresa sigue trabajando para abordar algunos de los problemas más apremiantes de la sociedad en la actualidad, y aportar las soluciones que estén en su mano.
Continuar leyendo: La historia de Amazon, la tienda en línea más grande del mundo