¿Tienes una mentalidad de riqueza o de pobreza? La mente es muy poderosa, es una de las herramientas más importantes que tiene el ser humano para establecer metas y cumplirlas.
Algunas de esas metas tienen que ver con la concepción de la abundancia que cada persona tiene. Por supuesto, cada quien construye sus deseos según sea lo que quiere para su vida. Sin embargo, dependiendo del comportamiento, a veces se generan mentalidades de pobreza y otras mentalidades de riqueza.
Acá te compartiremos algunas de las dinámicas o patrones que puedes identificar para elegir cómo quieres ser percibido y qué quieres conseguir aprovechando el poder de tu mente.
Mentalidad de riqueza vs Mentalidad de pobreza:
Si bien la mente es un órgano que puede entrenarse, es importante diferenciar los comportamientos que hacen que una persona se incline más hacia dinámicas que no son positivas y no aportan para su crecimiento.
Hay infinidad de ejemplos de personas que han logrado superarse gracias a que han entrenado su mente a pensar en pro de conseguir sus metas y esto se ve reflejado en sus vidas.
Puede parecer supersticioso, pero la realidad es que entre más uses tu mente para enfocarte en conseguir lo que deseas, más puedes ver materializados tus objetivos.
Acá te compartimos 5 ejemplos de cómo las personas pueden pasar de tener una mentalidad de pobreza a tener una mentalidad de riqueza.
1. La gente con mentalidad de riqueza habla sobre sus propias ideas:
La diferencia radica en la capacidad de valorar lo que haces, lo que piensas para estar enfocado en lo que realmente vale la pena.
Las personas que no saben lo que quieren y no están dispuestas a generar ideas, sólo pueden poner su atención en criticar o juzgar lo que ven en los demás.
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De esta manera, si identificas este patrón en ti mismo o en otros, primero, intenta plantearte hacerlo diferente, busca disfrutar más lo que haces y no te fijes en lo que los demás están haciendo.
De esta forma tendrás toda tu energía puesta en lograr esas metas que tienes propuestas. Por ejemplo, en lugar de criticar a tus amigos porque decidieron emprender y tú en el fondo también lo quieres, utiliza este tiempo para generar nuevas ideas de negocio.
2. A pesar del miedo que produce, cambia tus malos hábitos:
Parece simple, pero en realidad, requiere valentía y disciplina el ser capaz de identificar cuales hábitos no te están dejando avanzar o te están afectando de alguna manera, y poner en marcha un plan para cambiarlos.
Sobre todo porque un hábito es un comportamiento que se va naturalizando y empieza a pasar percibido porque se hace casi automáticamente.
Claro está, hay hábitos que pueden cambiar tu vida para mejor, así que, ¿por qué no hacerlo?
[publicidad_articulo]También hay malos hábitos como una mala alimentación, poco descanso, adicciones que controlan tu poder de voluntad, etc. que pueden resultar en limitaciones que no permiten que construyas tu vida tal y como la sueñas.
Robin Sharma, en su libro El club de las 5 de la mañana, comparte diferentes recomendaciones de cómo adaptarse a rutinas que empiezan a moldear una vida mucho más exitosa.
3. La gente con mentalidad de riqueza invierte dinero para ganar, los demás gastan para impresionar a los demás
Es muy común ver cómo la gente que no tiene controla bien sus finanzas personales, utiliza su dinero oara construir una imagen de sí mismo alejada de lo que quiere, solo por impresionar a otros o por tener una sensación de pertenencia.
Si bien es cierto que somos seres sociables, que necesitamos generar lazos que nos permitan compartir con otros, esto no quiere decir que debamos aparentar algo que no somos.
La realidad es que lo que poco nos han dicho es que ser pobre es mucho más costoso. En definitiva notaremos el impacto con el tiempo si no hicimos algo cuando era necesario.
Gastar dinero sin un objetivo claro, no hace parte de una mentalidad de riqueza:
Sin embargo, hay personas que tienen claro que, para lograr sus metas, deben hacer un buen uso de los recursos que tiene para poder conseguir más.
Saber invertir inteligentemente y renunciar muchas veces a lujos innecesarios, te permite apostar a largo plazo a una estabilidad más real.
Identifica tu comportamiento, aprende de quienes pueden aconsejarte en cómo debes aprovechar tu capital y conviértete en una persona exitosa sólo con cambiar tus pensamientos.
4. Una mentalidad de riqueza siempre aprende cosas nuevas:
Una de las mejores formas para atraer el dinero y estar en constante crecimiento es estar abierto a aprender cosas nuevas.
No hace falta que seas un genio en todo, pero es importante entender que siempre hay cosas nuevas por aprender, empezando por aceptar que no todo lo sabes.
Esto significa que vas a estar preparándote cada día para nuevas conversaciones, para nuevos proyectos y negocios rentables.
[publicidad_articulo]Las personas que asumen que lo saben todo, pierden el tiempo valioso que está en sus manos porque no dedican esfuerzo ni energía a escuchar opiniones diferentes que pueden cambiar la perspectiva hacia algo mucho más positivo.
Ser capaces de conocer nuestras limitaciones y estar dispuestos a corregir errores y aprender para ser mejores, es la clave del éxito de todo emprendedor.
5. La mentalidad de pobreza culpa a los otros por sus fracasos:
Equivocarse está bien, ya lo dijimos, pero asumirlo es todavía mejor. Al entender en qué te equivocaste, estás en la capacidad de visualizar cómo puedes mejorarlo, cambiarlo y hacerlo diferente la próxima vez.
No importa si toma tiempo lograrlo, pero una vez que eres consciente de lo que no salió como esperabas, estás listo para buscar soluciones. Quedarse estancado en el momento, es no permitir que las cosas fluyan correctamente.
Por lo general, las personas con una mentalidad de pobreza, no tienen la humildad suficiente para entender que a todos nos puede pasar y, en consecuencia, además de juzgar a otros por sus errores, siempre trasladan la responsabilidad de sus propios errores a las decisiones de los demás.
Es tan sencillo decir: Me equivoqué, pero voy a solucionarlo, avancemos. Quizás lo más complejo sea luchar contra el ego, pero una vez entendemos que las cosas pueden transformarse, es mucho más fácil entrenar la mente para ver mejores respuestas.
Libros recomendados:
Construye hábitos que te permitan tener una mentalidad de riqueza:
En conclusión, si bien la mente seguirá siendo todo un misterio, hay muchas cosas que ya sabemos y que podemos usar a nuestro favor.
Modificar los pensamientos puede tomar tiempo, es como un entrenamiento, y como tal debe ser constante y disciplinado.
Siempre que seas consciente de cómo reaccionas ante las circunstancias buenas o complicadas de la vida, vas a poder usar con claridad tu criterio y convertirte en una persona exitosa en cualquier ámbito donde te desenvuelvas.
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