No solo son sus resultados lo que distingue a Steve Jobs del resto de la humanidad. Tampoco el haber creado la empresa con mayor capitalización bursátil del mundo, ni el hecho de que (posiblemente) estés leyendo este artículo en uno de sus dispositivos.
Todo esto es de admirar. Pero fue su concepción que tenía de la vida; sus discursos, frases, visión, sueños y particular historia lo que lo distanciaba del resto. Es decir, su mente es lo que lo llevaba a estos grandes resultados.
En su biografía autorizada, su autor Walter Isaacson revelaba lo que se conocería como «tecnología mental» o el hábito de la meditación Zen que le permitía a Steve Jobs reducir el estrés, ser más creativo y tener una mayor claridad.
Técnica para entrenar tu mente:
No es una sorpresa que el fundador de Apple no solo tuviera una gran visión para la tecnología, sino para entrenar su mente.
Incluso, de acuerdo a una investigación neurocientífica realizada por Scientific American, se encontró que las técnicas de meditación que llevan años siendo practicadas tienen efectos positivos sobre tu cuerpo y mente.
A continuación tienes la técnica utilizada por Yang, Jwing Ming, un reconocido artista marcial, cuyas prácticas son bastante parecidas, por no decir idénticas a la manera cómo Steve Jobs entrenaba su mente:
1. Siéntate en un lugar en silencio con los pies cruzados. Preferiblemente sobre una almohada baja para reducir la tensión en tu espalda. Toma respiros profundos.
2. Cierra tus ojos y escucha tu diálogo interior. Los pensamientos que pasan por tu mente todo el tiempo: trabajo, hogar, el televisor…Esas ideas son las conversaciones de tu mente de mono.
No intentes detenerlas, al menos no por ahora. Más bien observa cómo saltas de pensamiento en pensamiento. Haz este ejercicio por cinco minutos todos los días por una semana.
3. Después de una semana, sin intentar silenciar tu mente de mono, durante la meditación centra tu atención en tu mente de buey.
Esta mente es la parte de tu cerebro que piensa de manera silenciosa y despacio. La que siente las cosas alrededor tuyo. No intenta darte un significado, simplemente observa, escucha y siente.
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La mayoría de las personas solo logran escuchar su mente de buey cuando experimentan un momento que los deja sin palabras, y momentáneamente detienen la conversación de su mente de mono.
Aun cuando tu mente de mono te quiere enloquecer con tantos mensajes, ideas, y presiones; tu mente de buey sigue ahí, pensando despacio con ideas profundas.
4. Una vez eres consciente de tu mente de buey, pídele que empiece a silenciar tu mente de mono. Una estrategia que puede funcionarte es imaginar que tu mente de mono está yendo a dormir debido a los pasos lentos del buey que se mueve pacientemente hacia el final del camino.
No te enfades si tu mente de mono se mantiene despertando. Es un mono y no puede evitar comportarse como uno.
No obstante, encontrarás que, a pesar de todas sus protestas, tu mente de mono preferirá descansar y dejar de hacer todo ese ruido que cansa e incomoda.
5. A medida que tu mente de mono se va calmando, continúa prestándole atención a tu mente de buey. Sentirás que cada respiro toma su tiempo. Sentirás el aire sobre tu piel y la sangre recorrer por tu cuerpo.
Cuando abras los ojos, el mundo te parecerá un lugar completamente nuevo. Una ventaja por ejemplo, dejará de serlo para convertirse en un cuadro lleno de energía, la cual no necesita de ser abierta, cerrada o limpiada. Es simplemente un cuadro.
6. Si bien puede tomarte un tiempo llegar a este punto, sabrás que estás haciendo el ejercicio correcto cuando no sientas el tiempo pasar en tu meditación.
Cuando llegues a este punto, comienza a incrementar el tiempo que inviertes en silencio. Particularmente, no importa cuánto tiempo lo practiques, sentirás que el tiempo no ha pasado.
Libros recomendados:
Beneficios de practicar esta técnica:
Primero, eliminarás por completo el estrés. Si bien este puede regresar en algún momento, al hacerlo comenzará desde el principio, así que podrás evitar que este se convierta en esa bola de nieve incontrolable.
Ver: Cómo quitar el estrés en cuestión de minutos con estos 9 hábitos
Segundo, eliminas la insomnio. Cuando practicas la meditación de forma regular, estarás en la capacidad de cerrar tus ojos y quedarte dormido inmediatamente. Poder lograr eso, es una razón suficiente para intentarlo.
Tercero, último y más importante, te permite pensar de una manera mucho más clara y creativa respecto a todo lo que sucede en tu vida. Podrás entender mejor aquellas relaciones que no agregan valor a tu vida y situaciones perjudiciales.
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